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Tan simple como querer madrugar para verte dormir, para levantarme y hacerte el desayuno. De esos con tostadas, café caliente, bollos y ese tipo de dulces. 

Y así cuando despiertes poder sacarte es sonrisa, la que cada mañana al despertar me hace sonreír a mi.

Creo que es la primera vez que siento esa seguridad, la de saber que tienes a alguien pendiente de ti, que te protege, que te cuida, que te quiero como nadie. Esa seguridad.